Las dos nuevas concejalas del Grupo Municipal Zieza han presentado en la última sesión plenaria ordinaria de la legislatura una moción para salvar de una "situación crítica" el futuro de la Escuela Unitaria de Cieza, incorporando un aula para niños de dos años. Rosana Marcano Rasillo y Noelia Blum González tomaron posesión de sus actas como concejalas en esa sesión y defendieron en pleno el interés de los padres por mantener abierta la escuela de cara al próximo curso. De hecho, afirman que se basan en un escrito que los padres del valle ya han presentado ante la Dirección General de Personal Docente y Ordenación Académica proponiendo la escolarización de los niños de dos años y comprometiéndose a llevar a sus hijos a dicha escuela y no a otros centros del entorno. Las familias han aportado datos sobre los niños nacidos en los últimos años, dejando claro que la natalidad se ha recuperado ligeramente en Cieza. Si en 2015 nació un niño y en 2016 dos, al año siguiente, en 2017 nacieron cinco y el año pasado tres. Con lo que las aulas de dos años, y con ello la escuela, tendrían futuro.
Futuro la escuela y el valle, porque en estos días en los que se habla tanto de la 'España Vaciada', cerrar un colegio así podría tener repercusiones en valles como el de Cieza, que van perdiendo población cada año que pasa.
Rosana Marcano y Noelia Blum apuntan que "creemos que la implantación del aula de dos años en esta escuela sería algo positivo tanto para los niños, que comenzarían su etapa educativa en un entorno conocido, como para el propio municipio que además de mantener su escuela sería un referente para otros municipios en situación similar".
Para su puesta en marcha sería precisa la contratación de un técnico por parte del Ayuntamiento, teniendo en cuenta que la Consejería de Educación, al finalizar el curso, reembolsa a los ayuntamientos el gasto generado por la contratación del auxiliar durante el tiempo lectivo (15.000 euros por aula).
En principio el alcalde, Agustín Saiz, ha visto con buenos ojos la iniciativa, pero ha querido "poner los pies en el suelo" y comenzar por solicitar una reunión con el consejero de Educación, Cultura y Deportes, Francisco Fernández Mañanes para saber qué requisitos serían necesarios. A partir de ahí el alcalde ha señalado que se reunirá a todas las partes interesadas, padres, profesores, consejería y Ayuntamiento. "Porque hay que tener en cuenta los condicionantes de una educación que exigirá nuevos espacios y profesorado específico, así que hay que estudiar primero que supondrá esa decisión", dijo.
