En el valle de Iguña duermen algo más tranquilos tras la visita del delegado del Gobierno en Cantabria, Samuel Ruiz, y el coronel de la Guardia Civil, Justo Chamorro, además de otros mandos del Cuerpo, al Ayuntamiento de Molledo. En el encuentro con concejales del valle, entre los que se encontraba el alcalde, Dámaso Tezanos, se pusieron sobre la mesa medidas a tomar para redoblar la seguridad en una comarca que ha visto como se incrementaban los robos en establecimientos públicos y viviendas particulares en los últimos meses. El alcalde solicitó al delegado y Guardia Civil el refuerzo de las patrullas del cuartel de Molledo, para lograr una mayor presencia en las calles de los agentes como medida disuasoria, especialmente durante las noches.

Dámaso Tezanos, que estuvo acompañado entre otros por el portavoz del Grupo Municipal Popular en Arenas de Iguña, Vicente Sánchez, destacó tras la reunión que, “a pesar de la sensación de inseguridad generada por la repetición de robos en pueblos como Santa Cruz o La Serna, en cómputos generales las estadísticas nos dicen que las faltas y delitos cometidos en la comarca han seguido una senda descendente”.

Como asunto específico de una comarca rural como la del valle de Iguña, el alcalde solicitó mayor “comprensión y sensibilidad” a la Guardia Civil con los vehículos agrícolas que trasladan de finca a finca, cruzando vías urbanas, rollos de hierba o aljibes de agua “bordeando la homologación”. “Entiendo que la Ley está para cumplirla, que es tajante, pero hemos abogado por una cierta sensibilidad con agricultores o ganaderos para, en la medida de lo posible, evitar que sean multados en lo que simplemente es el cruce por vías urbanas en tránsito de una finca a otra”.

Por último, la Guardia Civil se ofreció a organizar y llevar a efecto una serie de charlas informativas para comerciantes y vecinos sobre cómo actuar ante situaciones de riesgo.