Después de años de vacas flacas Los Corrales de Buelna vivirá en 2017 un nuevo tirón inversor que "dará la vuelta" al municipio, con nuevos puentes, reconstrucción de edificios emblemáticos, más asfaltado, mejores aceras e incluso grandes inmuebles adquiridos al Gobierno regional gracias a dos modificaciones de créditos que superan los 2,1 millones de euros. La responsable de Economía y Hacienda, Graciela  Solís, ha explicado que se ha esperado a conocer el resultado de la liquidación económica del año pasado para establecer prioridades e inversiones, destinando parte del remanente a los gastos que generarán obras ya comprometidas el año pasado y otras necesidades a incluir en el plan de actuaciones de 2017. Pero no se invertirá todo, "gastaremos con sentido común, sabiendo en qué y dónde invertir mientras se mantiene una cantidad importante para afrontar, en su caso, otras urgencias y se reservan fondos para el futuro", según añadió la alcaldesa, Josefina González.

El cierre del pasado ejercicio ofreció un remanente de tesorería de 4.644.500 euros. De ahí se retirarán los 2,1 millones para dejar en el banco aún 2,5 millones. Además se apunta un superávit de 1,6 millones de euros al cierre de 2016, según detalló Solís.

De las dos modificaciones de crédito aprobadas por la Corporación una asciende a 670.000 euros que se destinarán a nuevas actuaciones. De esa cantidad, más de 300.000 euros se irán a la reurbanización urbanística del barrio de Lombera. A nuevos planes de asfaltado y mejora de las aceras se destinarán 150.000 euros, y otros 57.200 a la compra de un gran edificio en el barrio Juan XXIII.

La compra de este edificio supondrá una inversión de ida y vuelta, ya que el concejal de Obras y Urbanismo, Luis Ignacio Argumosa Abascal, explicó que se pagará esa cantidad por el edificio pero el Gobierno regional revertirá ese dinero en obras para habilitar un inmueble perseguido por el Ayuntamiento desde hace décadas.

No solo se invertirá en obras. El Ayuntamiento está decidido a poner al día el archivo histórico municipal y para ello ha anotado un gasto de 22.000 euros en una nueva fase de reorganización del legado escrito de la localidad. Para mantener activa la elaboración de estudios y trabajos técnicos se destinarán 30.000 euros, la misma cantidad irá a un fondo de atención a obras menores, otros 10.000 a la renovación del mobiliario urbano y rústico, igual que para el mantenimiento de la flota de vehículos pública. Para evitar gastos de alquiler el Ayuntamiento invertirá 19.000 euros en la compra de un rodillo para el asfaltado de calles. La promoción de actividades culturales también está incluida en esa amplia partida.

La otra gran parte de las ampliaciones presupuestaria aprobadas por el Ayuntamiento se irá a financiar partidas abiertas para obras adelantadas el año pasado, como la cubierta de la piscina climatizada, los puentes de Barros y Coo, la cubierta de algunos edificios públicos o las nuevas naves de almacenaje municipales.

La alcaldesa incidió en que esa situación "es fruto de una gestión eficaz, que responde a las necesidades de los vecinos sin escatimarles inversiones que no están reñidas con un ahorro responsable". El hecho de que se haya hecho a través de modificaciones de crédito también tuvo explicación por parte de la regidora: "las partidas aprobadas en los presupuestos están encasilladas y son previas al cierre de cada ejercicio, además de las cantidades que van quedando por la adjudicación de obras que se están licitando a la baja, un ahorro que va al superávit y que en algunos casos se reinvierte y en otros se guarda".