Los colegios de los valles de Buelna, Iguña y Cartes han abierto sus puertas a un nuevo curso lleno de incógnitas. Más puertas que nunca, porque los centros han habilitado todos los accesos posibles para diversificar las entradas y salidas y garantizar, en la medida de lo posible, el distanciamiento físico. En cuanto a las incógnitas, como afirmaba el director del colegio La Salle, José Manuel Merino, "en esta nueva situación aún hay mil preguntas en todos los ámbitos para las que nadie tiene respuesta". A todas las familias les había mandado por correo electrónico un plan de contingencia de más de 80 páginas "y hemos comprobado su implicación, su interés, en una jornada en la que todo ha salido como se había previsto".

Como en todos los centros, se había escalonada la llegada y se habían detallado todos los accesos, incluidas trayectorias de colores en los patios para los más pequeños. "A las familias las pedimos responsabilidad y comprensión, pero sobre todo las felicitamos por su implicación y agradecemos su colaboración". A lo largo de la mañana fueron llegando los 340 alumnos de Infantil y Primaria del colegio.

En el José María Pereda la mañana también discurrió con total normalidad. "Da gusto la implicación de todos, cumpliendo las normas que se habían marcado", dijo la directora, Yolanda Gutiérrez. En cuanto a los alumnos, dijo que "venían todos muy contentos después de seis meses sin clases presenciales". "Haremos todo lo posible, pero asegurar que no vamos a tener contagios no podemos, lo que haremos será poner todo de nuestra parte". Fueron 320 alumnos los que comenzaron el curso. Muy pocas familias han preferido esperar a ver cómo se desarrollan los acontecimientos, sobre entre las de los estudiantes más pequeños.

Argentina Pérez, directora del colegio Gerardo Diego, aseguró que los alumnos llegaron "con muchas ganas, hemos visto a los pequeños muy ilusionados". Se han habilitado seis entradas, dos en Primaria y cuatro en Infantil, una por curso, "con lo que no hay problema". Reconoció "ciertos nervios" porque "toda esta situación requiere mucha responsabilidad, combinada con el hecho de que los niños estén bien, que se encuentren a gusto en una situación difícil, así que lo estamos enfocando todo de forma positiva, de forma constructiva". En el colegio tienen 350 alumnos.

En Cartes estrenaron curso y colegio. El antiguo colegio de La Robleda se ha desdoblado prácticamente para albergar a todos los alumnos de Infantil del municipio. La directora del nuevo colegio, Inés Pérez Castañeda, agradeció a las familias la colaboración "con el protocolo para acceder hoy al centro haciendo que el primer día del curso sea más seguro. Ha salido todo muy bien", dijo.

También se estrenó curso en el colegio Manuel Lledías de Cartes dónde se concentran todos los alumnos de Primaria, cerca de 600 alumnos en total en Cartes.

Por último, Marcos Carrasco, director del colegio Torres Quevedo de La Serna de Iguña, contó que la entrada al colegio "que generaba cierta incertidumbre, se ha desarrollado perfectamente, hay algunos ajustes que podemos hacer pero ha ido muy bien". Había nervios, dijo, "porque al final es una situación novedosa a pesar del mucho trabajo que se ha hecho durante días para normalizar en lo posible esta especial situación". El colegio sigue sumando alumnos hasta los 207 actuales.