El Ayuntamiento de Los Corrales de Buelna quiere poner fin a la presencia indiscriminada de excrementos de perros en las calles de todo el municipio y para ello ha emitido un bando que recuerda que la dejadez de los dueños no solo es reprobable sino que es sancionable. En concreto, la cantidad a pagar en caso de flagrante delito, de perro y dueño, es de 150,25 euros. La alcaldesa de Los Corrales de Buelna, Mercedes Toribio, ha remitido una nueva orden a la Policía Local recordando la necesidad de atajar ese tipo de acciones. También ha emitido un bando en el que destaca uno de los puntos de la Ordenanza de Convivencia Ciudadana, el artículo referido a la prohibición, y en su caso sanción, de “toda acción que afee, ensucie, produzca daños o sea susceptible de producirlos en lugares de uso o servicio público”, más concretamente el apartado que incluye en ese artículo el llevar a los perros a defecar a los jardines o lugares públicos. Y, junto a ese bando, ha emitido otro sobre la Ordenanza Reguladora de la Tenencia y Protección de Animales. En este caso se marca el artículo dirigido a los poseedores de perros de raza de guardia y defensa, para que adopten las medidas necesarias para que el animal no pueda circular libremente por vías y espacios públicos o privados, así como impedir su libre acceso a personas, animales o cosas que se hallen en ellos. En toda cosa, recuerda el artículo, deberán circular sujetos con correa y llevar bozal. Las acciones que vulneren este artículo se consideran muy graves y están sancionadas con una multa de 60 a 300 euros.