El consejero de Obras Públicas y Vivienda, Francisco Rodríguez, acompañado de la alcaldesa de Los Corrales de Buelna, Mercedes Toribio, ha visitado en San Mateo (Los Corrales de Buelna) las obras de la reparación de la cubierta de la pista del centro cívico San Mateo, realizada por el Gobierno de Cantabria. En la visita también han estado presentes el director general de Obras Públicas, José Francisco Sánchez Cimiano y varios concejales de la corporación municipal.
Según informó Rodríguez, esta obra ha sido una reivindicación de la alcaldesa y de la peña cultural Rebujas, organizadora de las famosas fiestas de San Mateo de la localidad, ya que en la pista se celebran varias de las actividades de la festividad.
Rodríguez ha recordado que las filtraciones de agua que se producían en la cubierta amenazaban con deteriorar la instalación y que era necesario actuar. “Había un compromiso para reparar la cubierta en cuanto hubiera recursos, y así lo hemos hecho para atender las peticiones de los vecinos”, señaló el consejero.
La alcaldesa de Los Corrales, Mercedes Toribio, ha recordado que esta pista ya comenzó con problemas cuando se planificó, ya que según el proyecto no guardaba las distancias adecuadas con la carretera y tuvo que rehacerse. Añadió que posteriormente se produjeron filtraciones de la cubierta que se solucionaron, y finalmente, las filtraciones de agua volvieron a producirse en torno al lucernario “que no aportaba nada por la claridad que tiene la pista”. La alcaldesa ha agradecido la sensibilidad del consejero con los vecinos de Los Corrales accediendo a financiar las obras de la sustitución de dicho lucernario, solucionando el problema.
La cubierta de la pista, de siete metros de altura, es de zinc invertida y tiene dos faldones con una pendiente que recoge las aguas al centro mediante un canalón de reducidas dimensiones, con una bajante en cada extremo. En época de lluvia, el canalón se desbordaba y las filtraciones de agua dañaban la estructura. Además, las juntas del lucernario de policarbonato sellado de la cubierta se habían deteriorado y aumentaban las filtraciones. Para evitarlo, se ha procedido al desmontado y retirada del lucernario y a su sustitución por tableros de 1,5 centímetros de espesor. También se ha limpiado y mejorado el desagüe del canalón que exigirá al menos una revisión anual para evitar sedimentaciones que dificulten la evacuación de las aguas.
