La Comisión Regional de Ordenación del Territorio y Urbanismo (CROTU) ratificó hoy, bajo la presidencia de la vicepresidenta y consejera de Universidades e Investigación, Medio Ambiente y Política Social, Eva Díaz Tezanos, la aprobación definitiva del Plan General de Ordenación Urbana (PGOU) de  San Felices de Buelna.

La larga tramitación de ese PGOU ha culminado con la aprobación definitiva del mismo, sustituyendo a las antiguas normas urbanísticas subsidiarias que eran del año 1990.

Según Díaz Tezanos, la aprobación del plan permitirá «acabar con situaciones de inseguridad jurídica evidentes». La posibilidad de contar con instrumentos urbanísticos aprobados se convierte en un elemento «fundamental» para el desarrollo social, económico y territorial de estos municipios, dijo.

Por su parte el alcalde de San Felices, José Antonio González Linares, se mostró satisfecho con el fin de un proceso que se ha alargado, dijo, durante más de 16 años. El regidor regionalista aseguró que la consecución del planeamiento es «uno de los proyectos más importantes desde que soy alcalde».

González Linares ha explicado que se trata de un plan "selecto" que regula la protección (sin cambios de calificación) de más de un 80% del suelo del municipio para "mantener la esencia de San Felices de Buelna como pueblo, sin grandes construcciones que desfiguren este municipio, preservando el pueblo que conocemos sin perder su encanto". En ese contexto, el plan perfila el incremento de zonas verdes en los núcleos urbanos y asegura las zonas de esparcimiento y paseo entre los barrios del municipio.

El alcalde ha incidido en que se permite la construcción de viviendas, preferentemente individuales, "siempre garantizando una buena calidad de vida, con servicios de calidad a la altura de municipios mucho más grandes".

En cuanto a la población, el documento señala que, tras décadas perdiendo habitantes, desde hace unos años el municipio se está recuperando, aunque no se prevén cambios sustanciales de cara a un futuro cercano. San Felices de Buelna comenzó el siglo con cerca de 2.000 habitantes y tras 14 años se acerca ya a los 2.300, un incremento paulatino que podría consolidarse en los próximos ejercicios. Aunque la documentación también recuerda que el pueblo llegó a tener, a mediados del siglo pasado, 3.000 vecinos, una cifra difícil ya de igualar.

También se pone especial énfasis en la conservación de la riqueza patrimonial, histórica, arqueológica y arquitectónica de San Felices de Buelna. El alcalde ya había avanzado que uno de los objetivos ha sido ampliar la defensa integral del macizo del Dobra, recogida por el futuro planeamiento. "Es un monte muy castigado por las explotaciones mineras y era hora de que se protegiera en la mejor oportunidad que hemos tenido para ello".