El Comité de Hermanamiento de Los Corrales de Buelna con La Haye Fouassiere prepara ya el próximo viaja a la localidad gala para reforzar los lazos de amistad entre los dos municipios, aprovechando la celebración del 15 aniversario de la firma de esa unión. Los viajeros cántabros aprovecharán el puente del 1 de noviembre para visitar y conocer más a fondo la población y entorno de La Haye Fouassiere. Para que todo salga a la perfección representantes de los dos comités, francés y español, se reunieron en junio y ahora toca explicar a socios y simpatizantes en qué consistirá ese viaje. Para eso se ha convocado una reunión que tratará el viaje y el programa previsto. Será hoy a las ocho de la tarde en el centro social La Rasilla, donde tiene su sede la asociación de hermanamiento. La visita se centrará en un mayor conocimiento del entorno y las tradiciones deportivas, sociales o culinarias de La Haye. Y las fechas concretas para el desplazamiento se han fijado entre el viernes 29 y el lunes 31 de octubre, con la intención de que cuantos quieran estén de vuelta para visitar a sus familiares fallecidos la festividad del 1 de noviembre.
El 27 de octubre de 1996 se firmó en Los Corrales de Buelna el hermanamiento con la localidad gala de La Haye Fouassiere, documento rubricado y sellado el 3 de mayo de 1997 en Francia. La Haye Fouassiere es una de las poblaciones que rodea la ciudad de Nantes, a unos 35 kilómetros, con un padrón cercano a los 3.000 habitantes que viven principalmente de la industria vinícola. El último encuentro entre los vecinos de La Haye Fouassiere y Los Corrales de Buelna se producía el pasado año en Los Corrales de Buelna, encuentro que sirvió para relanzar los lazos de unión y demostrar las magníficas relaciones que existen entre ambas poblaciones, según manifestaba el comité español presidido por Cintia González Hoyos.
Unas buenas relaciones que tienen una expresión mucho mayor en la vertiente francesa, porque los corraliegos siguen siendo, 15 años después, un poco fríos con respecto a esa unión de poblaciones. Luisa María Ingelmo lo explicaba al hablar de los cursos de idiomas que imparte, de forma gratuita, cada comité. En Francia se ofrecen clases de español para niños y adultos, con más de 40 alumnos. En Los Corrales de Buelna también se ofrecen clases de francés, con una única alumna. Y eso teniendo en cuanta que La Haye Fouassiere no llega a los 3.000 habitantes mientras Los Corrales de Buelna pasa de los 11.600. Otra diferencia notable es que en Francia el comité de hermanamiento está compuesto por 20 personas, mientras en España cuesta encontrar una junta directiva de cinco componentes.
De una forma u otra la intención es potenciar las muchas posibilidades que ofrece el hermanamiento para los estudiantes. Por ejemplo, se va a trabajar en facilitar la realización de prácticas de formación profesional en el país de acogida. Para ello el comité se pondrá en contacto con la Asociación de Comerciantes y Empresarios del Valle de Buelna. Ya hay un precedente, una chica especializada en relojería que terminó el curso que se imparte sobre esa materia en Francia e hizo sus prácticas en Joyería González. Allí la especialidad más recomendada sería la enología, dada la actividad mayoritaria de la comarca. De hecho, en el pueblo galo, del tamaño de San Felices de Buelna, llegaron a tener 200 bodegas.
