(En el reproductor, Gemma Pérez).
El personal sanitario, administrativo y de servicios del centro de Atención Primaria de Los Corrales de Buelna y residentes y trabajadores de la residencia de mayores Clece Las Anjanas de la localidad se vacunaron este martes 12 de enero contra el coronavirus, en una jornada que todos vivieron con especial emoción, un día "histórico", como señalaba la responsable de enfermería del centro de salud, Maite Gutiérrez. Coincidió en reconocer, como ha sucedido en tantos lugares ya desde el inicio de la campaña de vacunación, que "es la sensación de que empieza a notarse el fin de tanta responsabilidad, de tanto miedo, de congoja cada vez que visitamos a un anciano por lo que puedes llevar contigo, por mucho cuidado que pongas". Es, decía, "sentir el final del túnel y empezar a ver la luz". Lo reconocían todos, personal sanitario y de la residencia, ese temor que sienten aun cada vez que entran en una casa para asistir a un enfermo, cada vez que vuelven a la residencia a trabajar "sin saber que podemos llevar encima".
Sobre las 11 de la mañana comenzó la vacunación en el centro de salud, y en una hora se vacunó a todo el personal, 75 personas. Después se trasladaron a la residencia, apenas a un minuto andando, una residencia que no ha arriado en ningún momento la bandera de libre de coronavirus en todo este tiempo de pandemia. Allí, personal de enfermería de Atención Primaria vacunó a los 50 residentes y 39 trabajadores.
En total 154 vacunas, 154 personas que han comenzado el proceso de inmunidad. Esperarán a que dentro de 21 días se les administre la segunda dosis y, a partir de ahí, comenzará la cuenta atrás, siete días para poder decir que están libres del coronavirus. Una vacunación rápida, sin contratiempos, siguiendo todos los protocolos, porque "con gente, voluntad y aptitud se logra todo", decía Maite Gutiérrez.
También la directora de la residencia, Gemma Pérez, sentía ese primer paso para abrir de nuevo las puertas a la normalidad, pero, como ha hecho en todo momento, con los pies en el suelo, alertando de que queda mucho camino por delante y que se mantendrán todas las medidas de protección actuales.
Confirmó que han logrado, "gracias al trabajo e implicación de todos", estar libres del virus. Algo que se ha conseguido manteniendo también el pulso cuando se han activado las medidas de prevención en los casos de algún trabajador que ha podido estar en el entorno de personas positivas.
Explicó que hace unos días la residencia recibió el aviso de la vacunación y el protocolo marcado desde Salud Pública y este martes "ha sido suficiente con atenerse a estas indicaciones".
Una de las residentes, Pilar Urcelayeta, aseguraba no haber tenido miedo a contagiarse en ningún momento, ni tampoco preocupación por recibir la vacuna. Igual de tranquilos se mostraban Natividad Canal, Dolores Martín y el resto de los residentes, con el valor y la templanza de los muchos años vividos y tantas cosas vistas.
