No está pasando desapercibido el trabajo que está desarrollando el equipo destinado por el Ayuntamiento de Los Corrales de Buelna a la limpieza de espacios naturales. Ocho personas contratadas gracias al acuerdo entre la Consejería de Empleo y el Consistorio con el que se vuelve a la carga con el plan de limpieza, desbroce, eliminación de hierbajos o retirada de residuos en calles y pistas de los barrios y pueblos del municipio. Una nueva fase que ha arrancado en enero y que ya se ha dejado notar en la periferia del casco urbano. La responsable municipal de Medio Ambiente, Isabel Fernández Quijano, habló de una labor que "llama la atención" porque se está desarrollando acera por acera, pared por pared, en cada tramo de más de un centenar de calles y caminos de Los Corrales.

El trabajo comenzó el año pasado y tiene continuidad desde los primeros días de enero con una nueva cuadrilla elegida para el proyecto de conservación y mejora del medio natural, con cargo a los planes de cooperación del Gobierno regional con los ayuntamientos para la contratación de personas desempleadas, personal incorporado temporalmente a la plantilla municipal tras una selección realizada por el Servicio Cántabro de Empleo (EMCAN) entre personas desempleadas inscritas en sus oficinas como demandantes de empleo.

No deja de ser una posibilidad, decía la concejala, de abrir una vía de acceso al mundo laboral para las personas que participan en ese proyecto, un trabajo que no para de recibir las alabanzas de los vecinos de cuantas zonas han recorrido hasta ahora.

De ellos se puede decir que arrasan con la suciedad allá por donde pasan, como ha quedado claro en desde San Andrés a Penías, la zona industrial o Somahoz, donde comenzaron un recorrido que les llevará por todo el municipio durante los próximos seis meses. Han pasado ya por San Benito, el Corraleo, Pero Niño, Fundidores, La Pelá y la Aldea y los resultados "a la vista están", decía Fernández Quijano. Esta semana han llegado al barrio de Lombera, las calles Mies de la Hoya, Guzmán el Bueno, Madrid, Ángel Sanz Briz, Santander, Ramón y Cajal y otras adyacentes hasta llegar a las inmediaciones de Juan XXIII. El mes de enero le han cerrado en la calle San Fernando, pasando por Nuestra Señora de Las Caldas y San Ramón. "Una gran labor de equipo", decía Isabel Fernández Quijano.