El Ayuntamiento está exprimiendo la concesión a una empresa privada de la gestión del alumbrado público, estudiando y mejorando la iluminación calle por calle. Incluso en puntos muy concretos, como los pasos de peatones. Algunos, como el de la Avenida Cantabria, frente al Ayuntamiento, eran un auténtico peligro por falta de visibilidad, especialmente en noches de lluvia. Un punto negro, literalmente, donde se habían producido ya varios atropellos. El concejal de Servicios municipales, Joaquín Espinosa, explicó ayer que ya se ha puesto remedio, mejorando el alumbrado en toda la zona y colocando una farola de gran altura enfocada directamente hacia ese paso. Lo mismo, dijo, que se ha hecho y se continuará haciendo en aquellas zonas mal iluminadas como la calle Real, donde se han colocado nuevos puntos de luz, o Las Caldas de Besaya, donde ayer se estudiaban los lugares a colocar seis nuevas farolas.
El concejal enumeró las calles que cuentan con nuevos puntos de luz, y aquellas donde se han renovado, pintado e incluso enderezado las farolas. Otras, como el caso de la Avenida Cantabria, se han elevado para ampliar el haz de luz y mejorar la sensación del paseante, además de su seguridad.
En ese aspecto, se mostró preocupado por lo que viene sucediendo hace algunas semanas en el entorno de la plaza del Conde Mansilla, donde personas sin identificar abren el cuadro de luz y apagan el alumbrado de todo el entorno, calles Onésimo Redondo, Real, Hermanos Salas o La Salle. El hecho se ha puesto en conocimiento de la Policía Local para su investigación.
También se está procediendo a retirar los postes y cables que de nada servían ya, y también se están eliminando postes de hormigón para a continuación dejar un tendido subterráneo, por ejemplo en las calles Felisa Campuzano y Dos de Mayo. Y se ha mejorado las instalaciones eléctricas de edificios como el que acoge la Agencia de Desarrollo Local, el centro cultural La Pelá, el centro social La Rasilla o la Casa de la Música. Siempre, dijo el concejal, pensando en la eficiencia energética y el objetivo puesto en asumir la normativa contra la contaminación lumínica. Ya se han cambiado las bombillas con mercurio a las de vapor de sodio en un 95% y se está renovando la instalación de calefacción. Así, se ha mejorado la caldera del Ayuntamiento, los radiadores de La Rasilla y se prepara la instalación de un nuevo calefactor en el pabellón cubierto del Estadio Municipal de Deportes.
Terminó explicando que la mayor parte del coste lo asume la empresa Ohmsa y que se está avanzando en los estudios sobre el grado de iluminación en algunas calles concretas. Pero insistió en que no se quitará ningún punto de luz y ninguno de los existentes estará apagado.
