El Ministerio de Fomento espera poner pronto remedio a la inestabilidad del terreno sobre el que se sustenta el ramal de acceso desde la Autovía de la Meseta a Los Corrales de Buelna, a la altura de Somahoz, en sentido Torrelavega, cerrado desde hace días para disgusto de los conductores que llegan al valle desde el sur. Para ello ha adjudicado un proyecto de obra presupuestado en 550.000 euros que se plantea como la "solución definitiva" a un problema que ha obligado a cortar al tráfico este año en dos ocasiones ese acceso. Y de momento no hay fecha para reabrirlo, porque las labores de refuerzo del terreno dependerán de cuánto hormigón soporte ese suelo o cómo se comporte la meteorología.
El hundimiento de la calzada en febrero de 2015, causando un socavón de cerca de dos metros cuadrados, hizo aflorar las dudas sobre un terreno afectado por un problema de encauzamiento de las aguas subterráneas. Las fuertes lluvias pusieron el resto y las tareas de cubrir el enorme agujero mantuvieron el acceso cortado durante mucho tiempo. Se reabrió meses después pero en marzo de este año nuevos hundimientos parciales de la calzada (también en un periodo de fuertes lluvias) obligaron a cortar de nuevo el ramal, acometer obras e iniciar los estudios pertinentes para hallar una solución definitiva a la inestabilidad de ese terreno. Se reparó el firme de la calzada, se mantuvo una parte cortada y se reabrió para volver a cerrarlo de nuevo en septiembre, tras el verano, con el objetivo puesto en ejecutar el tratamiento final que permitirá la recuperación del ramal de Somahoz, como han señalado desde la Delegación del Gobierno.
La actuación se centra en reforzar ese terreno, evitar que el agua que cruza la autovía en la base del monte Gedo vuelva a socavar los cimientos y afianzar la calzada. Los responsables de Fomento han reconocido su preocupación por el encauzamiento de las aguas subterráneas, una preocupación que ha llevado a los técnicos a dibujar una nueva conducción de los arroyos interiores. Expertos geotécnicos han estudiado el terreno y han diseñado una solución que se espera definitiva, y que pasa por una serie de medidas como la inyección de lechada de cemento para abrir una nueva canalización que evite hundimientos del terreno y reconduzca las aguas.
Los vecinos más veteranos del valle también han hablado sobre la inestabilidad de ese terreno, recordando que las aguas subterráneas que surcan esa zona parten del nacimiento del río Muriago, 'tapado' en su día por las obras de la Autovía.
Los negocios próximos a ese enlace se han quejado reiteradamente del cierre del acceso y las muchas personas que llegan desde el sur para trabajar en las fábricas de Los Corrales de Buelna se han unido a esa queja.
Entre tanto, los conductores que circulen en sentido Torrelavega podrán acceder al casco urbano por la entrada en San Mateo o en Barros. Si viajan en sentido Reinosa todas las entradas al municipio están abiertas.
Otra de las consecuencias que está teniendo el corte es que los grandes transportes que utilizaban ese acceso están teniendo que entrar al municipio por San Mateo, obligándoles a atravesar el casco urbano para el acceso a factorías como Nissan o Trefilerías Quijano.
